Normalidad en el cierre de la campaña de riego de Bardenas
El sistema de Bardenas afronta la recta final de la campaña de riego con normalidad, pero sin el optimismo habitual.
La falta de precipitaciones en el primer trimestre del año obligó a adelantar un mes el reparto de cupos a las comunidades de base, de junio a abril, una situación que está condicionado el curso de la acampaña y que también se refleja en el actual volumen del embase de Yesa, por debajo de los 200 hm3. A pesar de que el cierre de la capaña de riegos en el sistema de Bardenas se prevé ajustado, el trabajo que hacen los regantes a la hora de programar los riegos permitirá que puedan terminarla con cierta normaliad.
Por eso, desde la Comunidad General insisten en que hasta que Yesa no esté recrecido, los regantes dependen de la climatología, por lo que deben optimizar los recursos del agua. Su presidente, José María Vinué, tiene claro que "cuando la campaña es normal, con el embalse de Yesa con un nivel por encima de los 400 hectómetros del 1 de junio, los agricultores que están programados no suelen tener problema. Pero este año, que no teníamos el embase lleno, todo es poco. Es decir, la necesidad del recrecimento es importante y está ahí".
Desde el sistema esperan no terminar la campaña con un volumen inferior a los 80 hm3. Además, están muy pendientes de la sequía en la zona media del Ebro, que presenta mínimos históricos, lo que puede obligarles a aportar de Yesa al río Aragón 8 m3 por segundo. "La gestión de la Confederación Hidrográfica del Ebro pasa por la optimización de todos los recursos, evacuando agua de otros embalses y permitiendo que por el Ebro vaya el caudal suficiente para gestionar el regadío", concluye Vinué. Por su parte, las obras del recrecimiento de Yesa cumplen con el cronograma previsto.
FUENTE: HERALDO DE ARAGÓN
